El trabajo en la policía de Rusia no es nada fácil, cualquiera que esté empleado ahí tiene que contar con ciertos riesgos a los que se expone. Algunos dicen que este trabajo está creado específicamente para hombres. Sin embargo ahora también hay muchas mujeres policías que llevan su cargo con bastante éxito. ¿En qué exactamente consiste su trabajo? ¿Cómo son las policías rusas?

Mientras algunas niñas sueñan con convertirse en cantantes, modelos, azafatas o actrices cuando sean mayores, otras no ven su futuro de diferente manera que trabajando en la policía.

Mujeres policías, academia

El momento en que cambió todo

Por primera vez las mujeres policías aparecieron en el Imperio ruso a principios del siglo XX (1916). Para ese entonces las mujeres ya se encontraban en el ejército, pero sólo se les permitía ocupar puestos que no tenían acceso a cualquier tipo de documentación secreta.

La Revolución rusa de Octubre hizo que la situación cambiase un poco. En teoría desde ese momento entre las partes de la población masculina y femenina hubo igualdad, así fue proclamado oficialmente por el nuevo gobierno. Aunque en la práctica las mujeres policías sólo aparecían junto con sus compañeros masculinos en las filas de la guardia cuando había mucha escasez de hombres.

Policías rusas, uniforme

Como norma general, las mujeres se enviaban a trabajar en factorías y fábricas. A mediados de la década de los 40, después del fin de la Segunda Guerra Mundial, se produjeron algunos cambios. En aquel entonces casi 20 mil mujeres tomaban parte en la labor de la policía soviética. De todas estas miles de mujeres, casi un cuarto trabajaba en la investigación criminal.

¿Cómo tiene que ser la mujer para ser una buena policía?

Hoy en día en la Federación Rusa no tiene ninguna restricción por motivos de sexo, se aceptan tanto hombres como mujeres. Para poder optar a ser elegido hay que disponer de estudios superiores, excelente salud y una reputación impecable. Lo mejor es graduarse en una universidad especializada en la actividad del órden público y tener una carrera según la que la mujer pretende trabajar en el futuro siendo policía. Así, tener estudios de Derecho autoriza a obtener el rango de Teniente Menor inmediatamente al unirse a la policía. Pero si la mujer sólo posee el diploma de educación secundaria, entonces no podrá ascender a oficial.

Policías rusas

Aparte también prestan atención a los antecedentes biográficos de la candidata a policía. La chica puede ser rechazada por el simple hecho de que un familiar suyo haya estado en la cárcel. Aunque para las mujeres en Rusia el servicio en el ejército no es obligatorio, hacerlo sería una ventaja para ella si elige trabajar en la policía. Pero incluso si todas estas condiciones de la solicitante coinciden con los requisitos estrictos, no hay garantía al 100% de que al final la contraten. Pues, después de todo, hay que pasar la comisión médica, de la cual no todos obtienen la luz verde.

Restricciones para mujeres policías rusas

Aunque no hay limitaciones de género, sí que las hay de edad. Obviamente, las chicas que no hayan alcanzado los 18 años tienen que esperar para tentar la suerte y convertirse en una candidata de mujer policía. Y las mujeres mayores de 35 tienen que olvidar por completo de trabar en el cuerpo de seguridad de Rusia. La única excepción está para las chicas que ya antes han servido en la policía pero por alguna razón lo han dejado. Para ellas el límite de edad es hasta 50 años.

Pero igualmente la mayoría de las policías rusas que se ven son chicas jovenes. A los 45 años todos los que trabajan en los organismos de Seguridad del Estado de Rusia ya tienen derecho a jubilarse. En algunos casos hasta pueden hacerlo antes si les surge algún problema de salud.

Mujeres policías rusas en desfile

Cuando una mujer consigue un puesto en la seguridad estatal, debe olvidarse del maquillaje y manicura de colores fuertes, accesorios, joyas, decoraciones, ropa extravagantes y llamativas – todo está extrictamente reglamentado.

«¿Qué solemos llevarnos puesto? La falda no debe subirse ni bajarse más del nivel de las rodillas, debe estar a medida justa e igual para todas. Las medias tienen que ser de color corporal, los zapatos negros, del estilo clásico con la puntera cerrada, si llevamos tacón, no puede ser alto. Si llevo un vestido, lo tengo que complementar con un pañuelo que me cubra las partes del pecho y del cuello. Podemos usar camisas de manga corta, pero sin corbata, sólo se puede desabrochar un botón en el cuello, nada más de eso.” – Cuenta Alyona de 23 años, sargento de policía de la ciudad Saransk.

Alyona, 23. Mujer policía rusa
Alyona, 23 años

Las chicas tienen que estar en buena forma física para poder lidiar con los problemas que surjan durante su servicio. Por esto también hay un límite de peso para todas las solicitantes de empleo: no menos de 55 kilos.

«¿Qué es lo más difícil de mi trabajo? Haber ganado dos kilos de peso antes de la admisión. ¡Para alcanzarlo me dejaron menos de una semana! Si no lo conseguía, no podía ni soñar en trabajar aquí. Puede que se rían, en aquél entonces no paraba de comer todos los días y noches hasta no poder más, ¡pero nada funcionaba! Al final tuve que beber una botella de agua grande antes de presentarme ante la comisión médica. Menos mal que esto ayudó y me admitieron.

Comprendo perfectamente que trabajar en la patrulla no es para mujeres. Pero, ¿y qué hacemos si los hombres no quieren ir al servicio, mientras a las chicas nos sobran las ganas? Y sí, también soy consiente de que a los compañeros hombres no les agradamos (como sus socias), no quieren compartir con nosotras el cargo y nos reprochan detrás de la espalda.» – confiesa Elena de 27 años, policía del Servicio de Patrullas de la ciudad de Penza.

Elena, 27. Mujer policía rusa
Elena, 27 años

Obstáculos que les esperan a las mujeres policías rusas

Lo más complicado para las mujeres policías es mucha tensión psicológica en el trabajo. Además sirviendo en la policía las mujeres tienen que lidiar con jornada laboral ilimitada y la necesidad de seguir estrictamente el reglamento. Por las circunstancias tan duras, aparte del cansancio, también a veces tienen que enfrentar a la falta de comprensión por parte de sus familias. En Rusia no muchos hombres están dispuestos a aceptar el hecho que su mujer se ausenta de casa constantemente. Esta es una de las principales razones por las que muchas mujeres se retiran del servicio y se entregan a la familia.

Sin embargo, a pesar de todos los problemas y por muy extraño que pueda parecer, las mujeres tienen cada vez más ganas por alistarse en el servicio. En las oficinas de la policía de la Federación de Rusia cada vez hay más y más mujeres policías rusas que no piensan retirarse.